Una lectura que invita a la reflexión y al optimismo en estos tiempos que vivimos. La consecución de pequeños logros a través del planteamiento y desarrollo de ideas desde la sencillez, hacen que el lector descubra en esta historia cómo se puede llegar a lo más alto tanto en lo profesional como en lo personal.
Acabo de terminar este libro que compré hace unas semanas en una rápida visita a una librería de mi ciudad. No tenía referencias ni había oído hablar de esta nueva publicación de Bernabé Tierno, autor de esta obra que sí conozco por otros títulos que he leído.
Como dice su portada, se trata de la primera fábula que escribe Bernabé Tierno y eso fue precisamente lo que me animó a comprarlo. La verdad es que me ha encantado. Con el mismo propósito al que nos tiene acostumbrados este psicólogo a la hora de transmitir ideas, esta vez lo hace a través de una conmovedora historia de superación y humildad ante los demás y ante la vida.
La consecución de pequeños logros a través del planteamiento y desarrollo de ideas desde la sencillez, hacen que el lector descubra en esta historia cómo se puede llegar a lo más alto tanto en lo profesional como en lo personal.
El autor nos da una sabia lección de cómo las personas tratamos en ocasiones de ver los problemas mucho más grandes de lo que son, con lo que adoptamos la postura de no hacer nada porque la solución a los mismos es muy complicada. La realidad suele ser más sencilla y tomar valientes decisiones en un determinado momento, pueden sorprendernos por los beneficiosos resultados. Todo esto desde la persona de Ángel, protagonista de esta historia que con sencillas decisiones alcanza grandes éxitos.
Un libro muy recomendado que insta a la reflexión y reconocimiento en la forma de actuar de uno mismo.
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